No sabía como "titular" esta tarta, y lo más sencillo era hacerlo por lo que es, una tarta muy fácil con el añadido de la nata y bonitas fresas. Para este tipo de tarta, las fresas por su tamaño más reducido, mucho mejor que los fresones, aunque partidos por la mitad, también quedaran muy bien. Desde Febrero, que empiezan las primeras fresas, hasta que termina la temporada esta tarta cae muy a menudo casa. Se come con los ojos verdad ???
Ingredientes:
- Un bizcocho genovés (receta aquí)
- Almíbar para empapar el bizcocho (receta aquí)
- Mermelada de fresa (o la más guste, yo de melocotón casera)
- 500 ml. de Nata para montar
- Azúcar glass
- Fresas
- Pistachos
- Menta fresca
Elaboración:
Empezamos elaborando el día anterior un bizcocho genovés usando un molde de 20cms. (la receta aquí). Dejamos enfriar y reservamos.
Al día siguiente: Montamos la nata azucarando al gusto y reservamos en la nevera.
Partimos el bizcocho en dos. Empapamos con el almíbar y cubrimos con una fina capa de mermelada.
Cubrimos la primera mitad con nata y distribuimos fresas cortadas a trocitos pequeños. Cubrimos con la segunda mitad del bizcocho. Decoramos con la nata montada, las fresas, unos pistachos troceados y la menta fresca. Además de monísima esta riquíiiiisima!!!
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